Desde su fundación en 1923, el CME se ha dedicado durante casi un siglo a ayudar a los dirigentes y pensadores de todo el mundo a comprender el paisaje energético. Su primer encuentro, conocido como World Power Conference, reunió a representantes de 40 países con el objetivo de ayudar a reconstruir la red eléctrica después de la
Primera Guerra Mundial.
El Congreso Mundial de la Energía, como se conoce en la actualidad, se ha convertido en un evento que se celebra regularmente a nivel mundial y reúne a pesos pesados del mundo intelectual –como Albert Einstein y Max Planck–
con especialistas del sector y expertos tecnológicos, para que compartan conocimientos y lleguen al fondo de las más importantes cuestiones relativas a la energía de nuestro tiempo.
El marco político necesario para obtener una energía que sea sostenible y asequible debe basarse en una verdadera comprensión de todos los aspectos del mundo de la energía. Además, debe ser realista, equilibrado y estable para
que pueda atraer a los inversores.
Dar forma a la agenda energética
El CME engloba a las personas y las políticas que dan forma a los sistemas de producción y suministro de energía. Sin embargo, nuestro proceso excluye los intereses políticos y comerciales. Gracias a nuestra independencia, podemos servir de «barómetro» de los asuntos de mayor actualidad del sector de la energía para las personas clave en la toma de decisiones de los gobiernos, el sector y el mundo de la inversión.
El CME lleva más de 80 años publicando rigurosos informes que sirven a los legisladores y a los dirigentes del sector para sustentar sus decisiones más importantes.